La vida me la dio el sol
Yo resisto con poca agua
La etnia azteca es mi farol
Nunca le saco a la fragua.
Del fuerte desierto vengo
Heredero de pitahayas
Por eso no me detengo
Yo tengo muchas agallas.
Y cuando arrecia el monzón
Una o dos veces al año
Feliz soy puro corazón
Incapaz de hacer un daño.
También los cactus dan flores
Guindas, rojas y amarillas
Arropando de colores
El mundo con sus orillas.
Pero invadieron mis montes
Nos pagaban casi nada
No quisimos estar tristes
Y escapamos en manada.
Pobre, sabio y descontento
Salí pues de estos solares
Era ya migrante hambriento
Dejé mis ríos y mares.
Miles hermanos iguales
Encontré por el camino
Nos llaman los ilegales
Buscando nuevo destino.
Cuando llegamos al Norte
Encontré enemigos nuevos
Los enfrenté con buen porte
Pero los dejamos vivos.
Ahora me recupero
Rescatando lo perdido
Esta tierra es mi granero
Como siempre lo había sido…
Keyes, California, marzo 2023