"Poecrónicas"

--Columna Semanal--

ES MUY RECOMENDABLE (desde el ombligo de la luna) (*) - 13.08.2021

Por Manuel Murrieta Saldívar

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ES MUY RECOMENDABLE (desde el ombligo de la luna)
Imagen: En los murales del Palacio Nacional de la ciudad de México. Del archivo personal del autor.


En conmemoración de los 700 años de la fundación lunar de México-Tenochtitlan,

(Para Mayo y David Muñoz).
  • I

    En situaciones de claro resplandor
    hay que estacionarse unos momentos...
    buscar,
    por ejemplo,
    el escondite de alguna mariposa en medio de la urbe
    o el nacimiento de una civilización
    de la cual muy bien provienes
    mientras descubres las ruinas de lo que has dejado atrás.

    En los instantes adecuados
    conviene echarse un buen bocado espiritual para rememorar
    las rosas que crearon un milagro ciudadano
    o las capillas en las cuales se levanta una cultura.

    Mirar también los deslaves de concreto, cuevas de vidrio y rieles por donde viajan los temores en total indiferencia sin importar las horas pico o el futuro que te acosa.

    II
    Es necesario suspenderse,
    hacer un gran respiro para experimentar otros placeres,
    sacudir las pupilas gustativas con un sabor prehistórico
    tan puro y virginal
    como si fuera la única cosecha de la comunidad.

    O ir al kiosco,
    pararse en algún zócalo,
    en plazas y expendios de artesanos
    para mirarte tú en todos esos seres
    y objetos estéticos que al fin ya te rodean.

    Durante los tiempos muertos
    es indispensable además tomar las manos de los críos,
    subirlos con coraje a la pirámide,
    a un Templo Mayor,
    para que toquen los mitos desde el cielo
    mientras escuchan la voz de sus ancestros rodeados de cocina
    y lagos que se extinguen.

    También es provechoso
    dejarse pasear sobre navajas y cuchillos,
    en zonas de riesgo y noches marginales
    para experimentar las quejas y fiebres del nativo, el semejante,
    saber qué lo divierte, si sus rutinas de lujo
    o actos cotidianos incomprensibles para otros.

    III
    Es muy propicio, pues, dejarse invadir por el cansancio,
    poner a prueba tu armadura,
    la velocidad con la que sueltas la mirada
    y estiras tus pulmones con un oxígeno
    mezclado de humo de autobús y de Popocatépetl
    mientras las pulsaciones de los pies
    suben al corazón de estadios y edificios.

    Es muy recomendable todo esto,
    hacerlo en esas calmas que llegan como así
    o las que tú provocas en un arranque de misterio.

    Porque si no lo haces, si no te atreves,
    corres el riesgo de que vayan callando
    tus instintos uno a uno,

    se van haciendo inútiles
    e inservibles como la conformidad que paraliza
    y, lo peor, se extinguirá por siempre ese indagar
    —razón del existir—
    que hace sacar vida en los detalles,
    en lo insignificante y olvidado,
    en lo que ahora bautizas
    o en lo que se renueva a cada pausa del mundo,
    en esa tregua,
    cuando se posa la fuerza y la ternura que hace mover los pies...


    -----

    (*) Del poemario Poecrónicas en las urbes. Colección Sur Editores. La Habana, Cuba. 2019. Colección Sur # 339. 106 páginas. Más información en: http://manuelmurrietasaldivar.com/libros/poecronicas_en_las_urbes.html

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